La Zeta
Zas, he llegado. La última en salir a la pizarra.
Mi cabeza se hace un lazo y voy y formo zafarranchos. Soy, a veces, un pez que usa zancos para no mojarse los zapatos.
Ahora en serio, les saludo soy la Z, pizpireta y zalamera. Empiezo en la niñez con el “había una vez”. Enciendo la luz y traigo la razón.
La letra más suspicaz que es capaz de poner paz. Mi sutileza goza de gran prestigio en la realeza. Zarandeo las riquezas arrojando sus pobrezas. Soy de izquierdas, zurzo y refuerzo los inalcanzables. Esclarezco las adivinanzas y me afianzo en las certezas.
Acompaño al mundo en el azar. Voy de mudanzas y siento tristeza cuando veo la civilización zozobrar.
Soy muy dulce, tanto o más que el azúcar, me gusta poner zancadillas a los que cazan zarigüeyas, puedo tener brazos, pinzas o pezuñas.
Si algún día me buscas no olvides que soy azul, tan pero tan azul que me confunden con el azabache.
Mi cabeza se hace un lazo y voy y formo zafarranchos. Soy, a veces, un pez que usa zancos para no mojarse los zapatos.
Ahora en serio, les saludo soy la Z, pizpireta y zalamera. Empiezo en la niñez con el “había una vez”. Enciendo la luz y traigo la razón.
La letra más suspicaz que es capaz de poner paz. Mi sutileza goza de gran prestigio en la realeza. Zarandeo las riquezas arrojando sus pobrezas. Soy de izquierdas, zurzo y refuerzo los inalcanzables. Esclarezco las adivinanzas y me afianzo en las certezas.
Acompaño al mundo en el azar. Voy de mudanzas y siento tristeza cuando veo la civilización zozobrar.
Soy muy dulce, tanto o más que el azúcar, me gusta poner zancadillas a los que cazan zarigüeyas, puedo tener brazos, pinzas o pezuñas.
Si algún día me buscas no olvides que soy azul, tan pero tan azul que me confunden con el azabache.
No hay comentarios:
Publicar un comentario